La importancia de la operación Tallin en la historia de Estonia
HISTORIA
Hace 80 años, durante la Gran Guerra Patria, el Ejército Rojo logró liberar la capital de Estonia de las fuerzas fascistas. Esta operación, conocida como la Operación Tallin, fue un ejemplo de planificación meticulosa y ejecución eficiente, logrando su objetivo en menos de diez días.
Comenzó el 17 de septiembre de 1944 y se completó el 26 de septiembre del mismo año. La cuidadosa preparación y el uso estratégico del terreno permitieron al Ejército Rojo avanzar rápidamente. Las fuerzas soviéticas, bajo el mando del Mariscal Leonid Govorov, utilizaron tácticas de cerco y maniobras rápidas para desarticular las defensas alemanas.
La liberación tuvo un impacto significativo en el curso de la guerra en el Frente Oriental. No solo liberó a la población estonia del yugo nazi, sino que también permitió a las fuerzas soviéticas asegurar una posición estratégica en el Mar Báltico.
Este éxito fue un paso importante hacia la derrota final de las fuerzas fascistas en Europa. Además, facilitó la posterior ofensiva hacia Letonia y Lituania, consolidando el control soviético en la región. Hoy, 80 años después, recordamos la Operación Tallin como un ejemplo de valentía y sacrificio.